Críticas

¿Estamos dispuestos a aceptar críticas? Muchas veces nos vemos expuestos a las críticas y dependiendo de las circunstancias hay diversas respuestas. Según el momento y de la persona que venga actuamos de una u otra forma.  Hay tres tipos de críticas:

-Positivas que son las que realmente las aceptamos de buena manera ya que nos hacen crecer, son críticas de apoyo.
-Negativas las cuales nos hacen daño, son una advertencia negativa. Estas nos cuesta aceptarlas ya que no tienen ningún mensaje sino que pretenden mostrar un descontento y a veces de forma ofensiva.
-Constructiva son aquellas de las cuales aprendemos para así no volver a cometer el mismo error. Estas ultimas nos muestran el error pero buscan una solución para disminuir el fallo. Siempre hay que aceptarlas ya que de ellas se aprende y se mejora como persona.

Siempre nos cuesta mucho aceptar las críticas ya que es un cambio de pensamiento, un cambio de lo estructurado, por eso solemos actuar de forma agresiva y negando todo tipo de opiniones. Pero a la vez si lo pensamos bien deberíamos escuchar y aceptarla con respeto ya que estas nos pueden enseñar algo nuevo y a la vez, en vez de ser agresivo o prepotente deberíamos comunicarnos libremente sin tener miedo a lo que puedan decir o como reaccionar.
A veces por estas críticas tenemos miedos a actuar pero no hay que tener miedo ya que debemos aceptarlas con respeto y entendiéndolas.

Libres o no....

La sociedad desde pequeños nos manipula o nos aleja de nuestra libertad salvaje. A esta no le gusta la libertad, el poder ir y venir sin dar explicaciones, esto no le provoca provecho sino que solo engendra desorden e incoherencia social.

Esta nos gestiona el tiempo, espacio… Nos hace ver el mundo como quieren, nos inculcan unas leyes, unos modales o una educación de lo que está bien o no. Por eso desde pequeños estamos en el colegio donde nos inculcan lo que ellos quieren y deciden. En esta nos controlan nuestro tiempo, nos obligan a ceñirnos a unos horarios y también a un espacio, siempre estamos en una clase, sitio y solo cambiamos cuando el docente o el timbre nos lo manda. El instituto está diseñado para controlarnos, hay unas fuerzas de estado (profesores), unos talleres o departamentos colocados por todo el instituto para  así dominar a nuestra libertad.

La sociedad da la recompensa a los dóciles que se alejan felizmente de su libertad y cumplen adecuadamente todas estas normas, para ello le ofrecen diplomas, estatus pero todo esto es una manipulación para que sigas los pasos de estas personas y renuncies a tu libertad.

En realidad no somos tan libres como nos hacen creer sino que la sociedad nos rige nuestra libertad a través de horarios o de modales… Esta nos hace creer que una serie de cosas son las correctas pero en realidad eso lo deberíamos decidir nosotros mismo ya que cada uno debe elegir el suyo. Esta nos manipula desde pequeñitos y así pensamos lo que quiere, dice que poseemos libertad pero en realidad poseemos lo que ella nos quiere dar a entender. Esta situación no se puede cambiar ya que nosotros no somos coherentes cuando somos pequeños, pero si la podemos cambiar ahora y manifestarnos y elegir según nuestros principios. 

Madurez

   

Llamamos madurez al punto en el cual una persona puede llegar a tomar sus propias decisiones y ser consecuente con su actos, es decir con su propia libertad. Para llegar a este punto lo vamos haciendo a lo largo de nuestra vida, así de pequeños somos totalmente dependientes de nuestros padres, ya que estos son los que deciden por nosotros, sin embargo cuando crecemos nos vamos haciendo más independientes en todos los sentidos; es decir, más maduros.Muchas personas creen que la madurez depende de la edad, es decir, que vamos siendo más maduros a la vez que nos vamos haciendo adultos pero la realidad es que hay personas con edad adulta que siguen siendo niños en la mayoría de sus comportamientos, y niños que han madurado ligeramente por las circunstancias que les han tocado vivir,  independientemente la edad que tengan, se comportan como personas cabales y consecuentes de sus actos. Por todo esto la madurez depende principalmente de tu estado mental que esto lo constituye tu forma de vivir, tus experiencias o tus ideales...

Ser maduro es principalmente coger tu libertad y guiarla según tus intereses, es decir, fabricarte un futuro, tu eliges y en este acto de elegir puedes tomar muchísimos caminos que pueden ser acertados o no, esas son las consecuencias de la libertad, tu eres la o el que eliges y por eso es tu responsabilidad los actos que hayas decidido hacer, ya pueden ser tanto buenos como malos. La libertad es buena en este sentido de tomar tu vida y elegir según tu razonamiento lo mejor para ti pero a la vez tiene el inconveniente de saber elegir bien y recoger las consecuencias de ello.